Albertine Sarges. Superando la tristeza 

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Yolanda G. Alonso

Coordinadora editorial de SFF. Apasionada de las artes en todas sus expresiones y siempre liberando espacio para mantener la mente libre

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El amor sobrevuela el segundo álbum de Albertine Sarges, ‘Girl Missing’, una ensalada de sonidos bien aliñada que invita a la positividad y la resiliencia

Explorando un amplio campo de posibilidades sonoras Albertine Sarges parece tener claro hacia dónde se dirige con Girl Missing, su nuevo larga duración. Y a pesar del título de este trabajo, sospechamos que le ha valido a la artista berlinesa para encontrarse y curar heridas. Después de la buena acogida de su álbum debut, The Sticky Fingers (2021), tras el cual muchas publicaciones la nombraron como icono pop feminista, ahora Sarges muestra su lado más emotivo, pero con diversión y cierta actitud irónica que sorprende, en ocasiones, por su enfoque experimental. Esto se vislumbra en una cierta estética psicodélica, con guitarras distorsionadas y coros de voces moduladas, que se entremezclan creando una base sonora que hace que la voz de Sarges se perciba más sólida y cautivadora. Lo descubrimos, sobremanera, en Motherless Universe, el último adelanto del disco, un tema que te arrastra desde el primer segundo, llevándote a una galaxia onírica donde todo se deforma adquiriendo una consistencia inmaterial.

Anterior a Motherless Universe vio la luz Stand Near Your Fire, otro de los temas más rotundos de Girl Missing. Unos contundentes riffs de guitarra acompañados por un bajo igual de energético dan comienzo a la pista. Aquí, Sarges, muestra una naturaleza optimista que logra revertir los malos momentos. Lo consigue con una letra irónica en la que lo absurdo invita a la positividad y muestra la cara más amable de las relaciones, cuando conoces a alguien que te deslumbra. Relata uno de esos crush inmediatos que parecen dar luz a la oscuridad. Sarges le rinde culto desde el minuto cero y lamenta todo el tiempo desperdiciado hasta ese momento. Entonces, da gracias por haberle conocido con un “luckily we met”, que anuncia la letra, antes de que la locura se desate en el poderoso estribillo. Es muy recomendable chequear el video que acompaña la canción para darse cuenta, aún más, del humor que encierra este corte.

Aunque el tema del amor parece ser el hilo conductor de todo este nuevo trabajo de Albertine Sarges, ella misma lo asegura al describirlo como una “biografía sonora del amor” que toma carices distintos en cada pista. Por ejemplo, en Friendship aborda, asimismo, la amistad, explorando la hermandad femenina. Aunque es algo habitual en las relaciones, sobre todo en la juventud, parece que la amistad entre mujeres nunca se ha expuesto tan de cerca como en los últimos años. Sarges relata un acontecimiento común entre amigas cercanas. Se trata de compartir los malos momentos. Lo hace contando como su amiga, que acababa de romper una relación, pasó la noche con ella. Por la mañana ella se acercó a su cama con una taza de café. En ese momento, su amiga levantó la manta para invitarla a meterse a su lado. Sarges nos recuerda con esta letra que los amigos deben estar para eso, para tener un hombro en el que llorar cuando las cosas salen mal.