El Museo Louisiana de Dinamarca explora el océano para descifrar sus misterios a través de una exposición colectiva que reúne arte, historia cultural y ciencia
El océano, ese manto líquido que cubre el 71 por ciento del planeta, esconde una inmensa belleza, pero igualmente está repleto de horrores. Esta extensa superficie de agua colmada de mitología es una gran fuente de alimentos y materias primas, si bien, a su vez sirve de vía de comercio de bienes y personas o como vertedero. Por ello, son múltiples los caminos a explorar de este pulmón cada vez más asfixiado por la explotación. Todos estos temas son examinados en OCEAN, la exposición más importante del otoño en el Museo Louisiana de Arte Moderno. Este gran relato conecta arte y ciencia para intentar desvelar esos grandes misterios que oculta el océano y que tanto han estimulado nuestra imaginación. Ya desde el siglo XVII el océano ha despertado en la humanidad una gran fascinación por sus criaturas marinas. Este interés por la biología marina ha quedado reflejado en ilustraciones de libros y en las colecciones de historia natural.
La vida bajo la superficie del agua estaba ahí para ser cartografiada, clasificada y conquistada, y el arte tiene un papel clave en este sentido. Así se observa, por ejemplo, en las artesanías de vidrio desarrolladas por Leopold y Rudolf Blaschka a mediados del S. XIX. Estos artistas alemanes consiguieron, con este método artesano, crear modelos de vidrio realistas de algunos invertebrados marinos como las medusas y pulpos, difíciles de estudiar una vez que se los extraía del océano. Posteriormente, los avances tecnológicos y fotográficos han servido para descubrir mejor el mundo submarino. Desde Jacques Cousteau hasta el actual trabajo de artistas como Emilija Škarnulytė han supuesto un viaje que nos acerca a los secretos del océano y revela la relación del ser humano contemporáneo con la naturaleza.
Enfrentando los misterios del océano
En el siglo XIX, la sublime grandeza del océano fue materia de estudio de artistas como Caspar David Friedrich o Peder Balke. Estos pintores del romanticismo plasmaron el drama desafiante de la naturaleza en pinturas en las que el mar y el cielo se unen como en una confabulación cósmica. De este modo, reconocieron no solo la inmensidad del mundo, sino también el poder del arte para atenuar las emociones de pánico al transformarlas en imágenes.
Otro de los aspectos en los que se centra este estimulante estudio del océano indaga en su vertiente más mitológica. Aquí, el recorrido propuesto por el museo danés se enfoca en sondear lo desconocido, el vínculo del océano con lo mitológico. De esta manera, advertimos cómo nuestra relación con el océano ha sido moldeada por los mundos imaginarios de la Antigüedad, tanto del Renacimiento como del Barroco. En esos mundos abundaban los dioses del mar y otras criaturas. Frente a esta mitología occidental blanca hay nuevos tipos de mitos y contranarrativas que centran la atención en la trata transatlántica de esclavos, uno de los capítulos más oscuros del colonialismo occidental. Artistas como Ellen Gallagher y El Anatsui trabajan con estas nuevas mitologías relacionadas directamente con los esclavos africanos que habitan el océano.
Atendiendo también estas cuestiones la exposición se completa con la monumental obra Vertigo Sea (2015) de John Akomfrah. En esta pieza audiovisual el artista, de origen ghanés, encarna la fluida diversidad de belleza y horror que es el océano. Entonces observamos cómo ese hermoso fondo marino también acumula las huellas invisibles de la trata transatlántica de esclavos o de la caza indiscriminada de ballenas. Por un lado, las ballenas cantan, las olas rugen, las algas se balancean y el sol brilla. Pero, por otro lado, nos sorprenden las imágenes de ese horror que acompaña tanta belleza. Así, las ballenas son capturadas, los migrantes se hunden, los esclavos se ahogan, las plataformas petrolíferas arden, las gaviotas chillan. ¿Es una dicotomía intrínseca a la existencia?
DATOS DE INTERÉS DE LA EXPOSICIÓN
Título: OCEANArtistas: John Akomfrah, Anna Atkins, Peder Balke, Nina Beier, Jeanette Ehlers, Caspar David Friedrich, Ellen Gallagher, Susan Hiller, Pierre Huyghe, Kirsten Justesen, Utagawa Kuniyoshi, Niceaunties, Georgia O’Keeffe, Jean Painlevé, Howardena Pindell, Pipilotti Rist, Allan Sekula, Emilija Škarnulytė, August Strindberg, Superflex, Wolfgang Tillmans, Yuyan Wang y Francesca Woodman.
Comisariado: Tine Colstrup
Lugar: Museo Louisiana de arte contemporáneo, Humlebæk, Dinamarca
Fechas: del 11 de octubre de 2024 al 27 de abril de 2025
Horarios y tarifas: consultar
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