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De la mano de Matthew McConaughey, el realizador Harmony Korine en The Beach Bum busca la felicidad recurriendo a un humor del absurdo
Para su última película, The Beach Bum, el director Harmony Korine retoma la tradición de las comedias cannabicas estadounidenses de los años setenta. Un subgénero que aunque tuvo una corta duración, tuvo una influencia enorme. Este se recuperó en los noventa, con filmes como El gran Lebowski, de los hermanos Coen. Después se actualizó a mediados del dos mil. Un ejemplo de esto es Superfumados, de David Gordon Green. Sin embargo, tras el proyecto de Green, vuelve quedar de lado este tipo de cine. Hasta que ahora, el realizador de películas como Gummo, decide traerlo de vuelta con su toque personal. El guion, escrito por él mismo, sigue a Moondog, un poeta vividor que tras una tragedia deberá buscar la inspiración para publicar una nueva novela. Lo característico es que todo gira alrededor de la marihuana. De esta manera, se crea un universo propio con todo tipo de personajes.
Las claves del subgénero están en The Beach Bum, y aunque de primeras pueda parecer una película más, es un error pensarlo. El propio Korine, conocedor de esta cultura y crítico con la sociedad estadounidense contemporánea, da un giro a las ideas. Para empezar, Moondog es interpretado por Matthew McConaughey, seguidor del movimiento. Él lo da todo para llevar a su personaje más allá de la pantalla, disfruta con ello y transmite lo que este busca, la felicidad. Ahora bien, por lo general, estas películas carecen de desarrollo, pero en este caso se articula uno muy serio contra la adicción al alcohol. El director introduce en prácticamente todos los planos una lata de cerveza en manos del protagonista. De manera subliminal, mientras te lo pasas bien siguiendo su periplo, te das cuenta de que sufre un problema. A través de este método, muestra una sociedad adicta al consumo general.
Es recurrente en la filmografía del estadounidense situar cada uno de sus largometrajes teniendo en cuenta un tipo de personas y buscando intérpretes relacionados con lo recreado. Aquí se cuenta con un reparto lleno de estrellas pertenecientes al movimiento mostrado como Snoop Dogg, parodiando personajes que interpretaron con anterioridad. The Beach Bum es un ejercicio crítico, que navega entre el humor absurdo y la sátira social con un reparto de primer nivel. En esta encontramos a Zac Efron, conocido por High School Musical, que muestra una versión alocada de cómo podría terminar su personaje del otro filme. Esta no es la primera vez que Korine opta por personas conocidas gracias a Disney. En Spring Breakers escogió a actrices como Selena Gómez y Vanessa Hudgens para desmitificar las juergas universitarias. Al final, busca ser ácido con unas películas que no gustan a todos. Pero Korine puede enorgullecerse de hacer bien su trabajo.