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Ari Folman expone en ¿Dónde está Anne Frank? uno de los relatos que vertebran la historia de la humanidad
La historia se repite, incluso el arte recae en las mismas fórmulas de manera sistemática. Vivimos en un mundo de reincidencia y bucle en el que cada vez somos más conscientes de ello. Sin embargo, parecemos incapaces de escaparnos de los raíles impuestos. Todo este saber acumulado se siente reducido a una razón para dejar de sonreír. Por ello es tan importante la historia de Anne Frank. Necesitamos la experiencia subjetiva que nos permita sentir nuestros errores. Esta es la única forma de romper el ciclo en el que vivimos encerrados. De este modo, ¿Dónde está Anne Frank?, de Ari Folman, nos aproxima a uno de los relatos más elementales de nuestra historia.
Es una cinta. No se buscan juegos complicados de tensión como en otras de Disney al estilo de El Rey León o Mulan. Sin embargo, tampoco hay una búsqueda por construir un ambiente distendido en el que brille la ternura de la infancia como en Totoro. El filme de Ari Folman se encuentra en un punto medio donde sale a relucir el arte del largometraje. Una animación que parece dibujada por la propia Anne Frank. Los soldados nazis visten grandes túnicas negras con bordes filosos portando máscaras dignas de un villano de Star Wars. Las secuencias que nos acercan al trágico final parecen representaciones del tártaro. Escenarios de roca negra donde los trenes se vuelven barcas surcando el Estigia. En definitiva, es un ejercicio casi psicológico. Una composición de dibujos que encierran el amor de la joven judía hacia el cine y la mitología griega.
¿Dónde está Anne Frank? conserva el mensaje político que ya es tradición en el director. En esta ocasión, aunque a través del personaje de Kitty, busca crear la clásica relación de empatía con el espectador, persiguiendo un fin más expositivo. El objetivo principal es recordar la tragedia de Anne Frank. Por esto, la historia se estructura como una lectura constante interrumpida por las vivencias de Kitty. Parones en los que se busca asemejar las injusticias de la época nazi con las de hoy en día. Una cinta concienciadora que nos incita a investigar, descubrir y actuar. Es un recuerdo de los errores que cometimos y las oportunidades que tenemos de enmendarlos.