Viola Allo, Ijeoma Umebinyuo, Warsan Shire, Emi Mahmoud, son la nueva generación de poetas africanas jóvenes que visibilizan, mediante poesía, el racismo, el machismo y el colonialismo dentro y fuera de África
Desde la África subsahariana, suenan las voces negras, insurrectas y llenas de rabia de Viola Allo, Ijeoma Umebinyuo, Warsan Shire, Emi Mahmoud. Son poetas pertenecientes a la nueva generación de África, que se caracterizan por ser refugiadas. Reclaman su África natal, el poder del color de su piel, sus historias y el valor de ser mujeres originarias del continente que vio nacer al mundo. Cada una, desde su bandera y los versos que compone, reclama la tierra de sus ancestros y las libertades que dentro y fuera del continente les han sido negadas.
Tan diverso y rico es su lugar de origen, como las estrofas de las poetas que lo describen en palabras de rabia, sanación y reflexión. En un momento de catarsis, en el que el mundo entero está en jaque, y que el racismo se ha visibilizado en todas las latitudes, nuevas voces femeninas surgen para no dejar callar las injusticias. La África Negra o subsahariana, es la espina dorsal de un continente que desde su origen ha sido explotado, saqueado y esclavizado. Desde la poesía hecha por mujeres, África se cura de sus heridas y se eleva como una tierra fértil, independiente, y en pie de lucha.
Las nuevas voces africanas se caracterizan por los temas que enuncian, y desde donde lo hacen. Muchas están lejos de su patria, como refugiadas o inmigrantes. Es por ello, que dentro de su poesía es común encontrar temas como la diáspora africana, la inmigración y el vivir como refugiadas de la guerra. Estas autoras abrazan su negritud, y lo que representa ser una mujer racializada en un sistema patriarcal y racista, que además es extremadamente colonial.
Viola Allo (Camerún). Un pájaro de África
La diáspora africana, el exilio de su gente, y la nostalgia hacía sus raíces, son ecos que resuenan en cada oración de la poetisa camerunesa, Viola Allo. Con tan solo diecinueve años, Viola dejó su país natal para mudarse a Estados Unidos. Lejos de casa, en una tierra extranjera a su cultura, se refugió en las letras como medida de escape y, posteriormente, de denuncia de su realidad. “Escribo porque las ideas brotan en mí y deben salir. Escribo porque me encanta comunicar mis ideas y sentimientos en forma de poema. Escribo porque me hace feliz, me hace cuerda, me hace libre”.
Viola Allo considera que con su escritura puede marcar una diferencia en el mundo e inspirar una transformación colectiva en su continente, en su país, en sus personas, señala. Con sus poemas es la voz de George Floyd, de Breona Taylor, y de todas las personas negras que han sufrido a causa del racismo. De igual forma, en sus obras se asume como originaria de sus ancestros, de quienes heredó una tierra un territorio que ahora pertenece a los blancos. Un Estados Unidos, que ha saqueado la vida de su pueblo, y una África que se siente en cada injusticia.
Su primer libro, Bird from Africa (2014), que incluye 16 poemas, y por el cual fue reconocida con múltiples premios en Estados Unidos, aborda lo que fue vivir lejos de Camerún, y lo que significa ser de aquella nación colonizada. En su blog, Letters to Cameroon, donde recopila todos sus escritos, crea un espacio reflexivo sobre la pandemia, la belleza de ser negra, su historia, los derechos de la tierra y los campesinos. De igual forma, escribe ensayos sobre el racismo, antes y durante la era de Trump en su nuevo hogar.
Ijeoma Umebinyuo (Nigeria). Una sobreviviente
Teórica, poeta, y nigeriana, Umebinyuo se define a sí misma como una feminista “que mueve almas” a través de su poesía. Desde una perspectiva interseccional, aborda el ser mujer teniendo en cuenta la perspectiva de ser una inmigrante negra en Estados Unidos, valores que la dimensionan y diferencian de otras. Desde sus libros critica a las feministas blancas que son reconocidas en portadas de revistas, mientras que las mujeres de color son olvidadas y dejadas de lado. Ella busca que las niñas migrantes, negras, con pelo crespo, y cuyas historias y violencias han sido silenciadas, se sientan reflejadas en su obra.
Ella se confiesa a sí misma como “demasiado extranjera” tanto para las nigerianas como para las estadounidenses. Es más bien un testigo de ambos países. Su escritura busca romper el silencio al que han sido condenadas las mujeres por sentirse ajenas a sus cuerpos, ser violentadas sistemáticamente, y ser objeto de conquista. Con cada verso, Umebinyuo busca reivindicar el lugar que le corresponde a las mujeres como originadoras de la vida y sujetos políticos.
“Soy feminista, soy consciente de lo que pasa cuando se borran raza y género. Para que una mujer pueda escribir, hablar, narrar y curar historias como yo, ser feminista no es una opción: es una necesidad” señala Ijeoma Umebinyua. Su libro Questions for Ada ha sido muy celebrado por la crítica, quien la ha catalogado como una de las mejores poetas africanas contemporáneas.
Warsan Shire (Kenia). Una migrante africana en el camino
El mundo de las mujeres negras e inmigrantes en Londres es la realidad en la que se mueve esta mujer kenyana, de padres somalís, que tuvo que emigrar desde muy pequeña. El trabajo de Shire encarna una juventud migrante, alejada de sus ancestros y su lugar de origen. Asimismo, refleja como sus familias no conservan las tradiciones africanas, y al mismo tiempo tampoco empatan con las costumbres de su nuevo país. Es una comunidad formada por el choque cultural entre Occidente y África. La suya es una nueva generación africana, que se desarrolló como refugiada a orillas de Europa, entre la pertenencia y el desplazamiento.
“Nadie deja su hogar a menos que su hogar sea la boca de un tiburón, solo corres por la frontera cuando ves toda la ciudad corriendo también” (Shire, W, 2016). En su poema Home ーquizás el más conocido de sus trabajos antes de que su obra apareciese en la película Lemonade de Beyoncéー, habla sobre la necesidad de migrar de un país porque se ha vuelto inseguro. En su obra, Warsan defiende que los refugiados no viajan por gusto, sino por necesidad.
Warsan Shire remarca la existencia de la xenofobia en Europa. “La poesía es poder contar las historias de esas personas, especialmente de refugiados e inmigrantes, que de otra manera no se contarían, o se contarían de manera realmente inexacta”. En 2013, Shire ganó el premio de la Universidad de Brunéi a la mejor poesía africana por sus obras, como Teaching My Mother How to Give Birth (2011) y Long Journeys: African Migrants on the Road (2013). Además, es la primera joven poeta africana laureada en Londres. Actualmente, es editora de poesía en la Spook Magazine.
Emitithal Mahmoud (Sudán). Una poeta refugiada
“Cuando eres refugiada dejas de ver tu hogar como un lugar; y lo comienzas a ver como un grupo de personas que amas”, dice Mahmoud al referirse a la mirada que tienen los migrantes del mundo. Para ella, hogar y refugio son sinónimos de poesía, herramienta que le ha ayudado a subsanar sus heridas, y las de su pueblo azotado por el hambre, la pobreza y la guerra. Al tener que huir desde muy pequeña, y mirar como sus figuras maternas se oponían a la dictadura de su pueblo, fue como Mahmoud encontró palabras que pudieran explicar su dolor en versos.
Su poesía llena de coraje, rabia y enojo por la infancia, la tierra, la casa y la familia que le arrebataron, ha conmovido al mundo. Tal ha sido el impacto de su obra, que Emi Mahmoud ーcomo es mejor conocidaー fue nombrada embajadora de la buena voluntad por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR, ONU) en 2016. Desde entonces, ella ha recitado sus poemas frente a figuras como el Dalai Lama, Ban Ki Moon, y Barack Obama. Pero sobre todo, a niños y jóvenes que, como ella, dejaron atrás su hogar por la guerra en Darfur.
“No hables de la madre tierra africana a menos que sepas que ser de África significa despertar un pensamiento tardío en este país. No hables de mi sabor a menos que sepas que mi sabor es insurrección, es rebelión, resistencia”, exclama Mahmoud en su poema Mama. Esta obra, que le llevó a ganar el Individual World Poetry Slam Championship, habla sobre sus raíces, el cuidado de su madre y sus hermanos durante la guerra, y el tener que sopesar la muerte de su abuela mientras se encontraba alejada de su país. Mahmoud es de letras rebeldes y reales. De manera radiográfica, son letras que figuran las dolencias de un Africa refugiada.
Las nuevas generaciones africanas en la poesía
Todas estas escritoras, desde diferentes rincones del planeta, no se olvidan de su continente y la nación que las vio crecer. Aún lejos de casa, encuentran, desde otros países y rodeadas de otras personas, los problemas que han afectado su política, su familia y a ellas mismas desde pequeñas. Ya sea desde Estados Unidos, Europa, o cualquier otro lugar, sus poemas cargan la bandera de la migración, de ser refugiadas, de ser negras, de ser mujeres de la gran África. Cada palabra, verso, estrofa, y libro que escriben, acobija su furia, y su deseo de cambio contra la opresión y la colonización.