La pervivencia del documental como declaración de intenciones 

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Rosana G. Alonso

Alma mater de SFF. Librepensadora observando las dinámicas sociales y culturales desde una perspectiva feminista que se abre a lxs otrxs

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La exposición ‘Aún no. Sobre la reinvención del documental y la crítica de la modernidad’, que recibe el Museo Reina Sofía, ahonda en las narrativas de discurso documental de la década de los años setenta

¿Se puede ver una década a través de otra posterior, ahondar en una parcela específica de aquella, en los resquicios que quedaron abiertos y que sólo se pueden cerrar con el paso del tiempo, por medio de una historia que parece condenada a la repetición? La respuesta queda contestada en la pregunta. Y Jorge Ribalta, comisario del relato de relatos que acaba de presentarse en el Museo Reina Sofía, Aún no. Sobre la reinvención del documental y la crítica de la modernidad que excava en la década de los años 70 —unos largos 70s que comienzan en Mayo del 68 y se prolongan hasta los 80— lo confirma y lo explica al matizar que con esta muestra se dilucida la exposición precedente Una luz dura, sin compasión. El movimiento de la fotografía obrera, 1926-1939  que él mismo comisarió en 2011. Así que nos adentramos en un intenso viaje que da lugar a nutridas narraciones desde el discurso documental, como las concebidas desde la fotografía obrera y el fotoperiodismo.

Con una línea discontinua en el tiempo, se explica aquí, la historia de lo social-político y los cambios que estos relatos propiciaron, los debates que generaron y las brechas que abrieron. Es esta «una historia de perdedores» —en palabras de Ribalta— que viene a resultar muy significativa actualmente, ya que la fotografía, como dispositivo documental más notable, finalmente ha ganado la batalla institucional con un arma, la cámara, no sé si más letal, pero si más convincente desde su crudeza como testimonio documental. Un instrumento que en la actualidad se aprecia más activo, incluso más aún, precisamente porque seguimos inmersos en ese aún no, como aclara Borja-Villel, director del museo, en el prefacio al revelador catálogo que se ha editado con motivo de la exhibición alegando que «desde la conciencia de la laberíntica reflexión acerca de un tiempo cercano y extraordinariamente complejo, aquella luz dura, sin compasión con la que se identificó al movimiento de la fotografía obrera de la primera mitad del siglo parece, en su último tercio, convertirse en una advertencia, tan enigmática como potencialmente cargada de futuro: Aún no. Una declaración de intenciones que obliga a concebir tales experiencias con un acusado sentido del presente, de un presente cargado de herencias y promesas aún no desentrañadas». Una sugerencia imperativa que se recupera para el título de esta exposición recogiendo dos citas de Sergei Tretiakov y Martha Rosler en las que anticipan ese aún no  como un queda por hacer  que parece invitar a un hay que continuar intentándolo, seguir con las cámaras hasta alcanzar el material «menos falsificado de la realidad actual» que diría Tretianov en 1972 ya que «aún no tenemos el documental verdadero» afirmaba Rosler en 1981.

Y desde este prisma, desde esta proclamación de propósitos que avanza una recuperación del género documental de los 70 como crítica del arte moderno y sus instituciones, se cuentan, se divisan, se sienten, un conjunto de historias con ese mismo rayo de luz dura aunque matizado por una estética atractiva abanderada por un modo de ser que es presencial también en las actitudes, la indumentaria y el estilo —incluso en lo gráfico— que marcó una época consagrada a lo revolucionario en la conquista de los espacios públicos y de trabajo. El recorrido guiado por su comisario, absolutamente clarificador, se reveló fundamental para comprender en su complejidad la labor de todos los intervinientes que participaron en esta reinvención del documental generando el material que ahora se puede ver en el museo, más de 800 piezas. Algunas de ellas, nunca antes expuestas, llevaban más de 30 años almacenadas, esperando salir a la luz, atestigua Jorge Ribalta.

Un trazado que está planificado en función a tres figuras de resistencia. La primera de ellas, la que propiciaron los colectivos de fotografía obrera en la Alemania Occidental a través de grupos como Volksfoto, revistas como Arbeiterfotografie, los artistas Jo Spence y Terry Dennett, que serían los iniciadores del trabajo en la mítica Camerawork  y otros como Allan Sekula, una figura indispensable ya que fue un artículo suyo el que puso de relieve la importancia de la reinvención del discurso documental.

La segunda área en la que se hace hincapié, aborda las diferencias entre el Primer y el Tercer Mundo rescatando archivos imprescindibles como el documental sobre la vida cotidiana de la guerra del Vietnam realizado por Joris Ivens —fundador de la organización de fotógrafos obreros holandeses en Amsterdam en 1931—, las prácticas documentales de resistencia al apartheid en Sudáfrica, la legendaria iconografía de los Panteras Negras a través de los fotógrafos Ruth-Marion Baruch y Pirkle Jones en la que se puede ver el lado más humano de alguno de sus integrantes como Angela Davis o el trabajo de fotoperiodismo de Susan Meiselas en Nicaragua y El Salvador.

Finalmente, el recorrido termina con una iconografía de las minorías urbanas y las luchas micropolíticas que recogían revistas como Grama  de Santa Coloma de Gramanet o 4 Cantons  del barrio de Poblenou así como el Centre Internacional de Fotografía de Barcelona. Fuera de este ámbito, se muestra diversa documentación sobre el desalojo de la protesta urbana desarrollada en el centro histórico de Amsterdam en 1975 o material relativo a los movimientos italianos.

En síntesis, un circuito apasionante que conviene realizar con tiempo y a ser posible, se prevé muy recomendable apuntarse a las visitas guiadas que se organizan los miércoles y los sábados con motivo de la exposición.
 

Foto: Y.Yu de la exposición Aún no. Sobre la reinvención del documental y la crítica de la modernidad | © StyleFeelFree

Foto: Y.Yu de la exposición Aún no. Sobre la reinvención del documental y la crítica de la modernidad | © StyleFeelFree

Foto: Y.Yu de la exposición Aún no. Sobre la reinvención del documental y la crítica de la modernidad | © StyleFeelFree

Foto: Y.Yu de la exposición Aún no. Sobre la reinvención del documental y la crítica de la modernidad | © StyleFeelFree